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La cepa Multiplex de Xylella fastidiosa de Alicante puede afectar a almendros, ciruelo, melocotón, roble, plátano y arándano

Primeras reacciones institucionales sobre la situación de la Xylella Fastidiosa en España y en Europa

12/07/2017 Autor: Guiaverde.com

 Tanto la Consellería en la Comunidad Valenciana como el Ministerio han mantenido reuniones con asociaciones. La Asociación Europea de Viveristas (ENA) también ha redactado un escrito a la Comisión Europea.


 

La consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, expuso el pasado lunes ante la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, y los representantes de las comunidades autónomas en la Conferencia Sectorial la situación tras la detección de la bacteria Xylella Fastidiosa en Alicante y las actuaciones llevadas a cabo desde la confirmación del brote el día 20 de junio en el término municipal de Castell de Guadalest.


El análisis genómico solicitado al laboratorio del Instituto de Agricultura Sostenible del CSIC en Córdoba, ha asignado a la subespecie Multiplex la causa del brote detectado. Lo ha hecho tras analizar 10 muestras de ADN de almendro confirmadas como positivas para Xylella Fastidiosa por el Laboratorio Nacional de Referencia de Bacterias Fitopatógenas, que es el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA).

La adjudicación a la cepa Multiplex permitirá enfocar mejor las inspecciones y el seguimiento al grupo de plantas más susceptibles a esta subespecie, como son el ciruelo, el melocotón, el roble, el plátano o el arándano, además del almendro.

 

 

Tras la confirmación del positivo en la detección de la bacteria Xylella Fastidiosa  el pasado 20 de junio en una finca de almendros en Guadalest (provincia de Alicante), aparte de activarse el plan de contingencia, el engranaje formado por instituciones, asociaciones y entidades del sector verde tanto a nivel nacional como europeo han comenzado a funcionar a todo motor.

 

Por un lado, la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Comunidad Valenciana, publicó el pasado 7 de julio en su Diario Oficial la resolución por la que se declara la existencia de un brote de la plaga de Xylella Fastidiosa en el territorio de la Comunidad Valenciana, por la que se adoptan medidas fitosanitarias urgentes para su erradicación y control, es decir, todos los pasos del plan de contingencia.

 

Dichos pasos consisten, una vez se declara como infectada una parcela, en establecer la zona demarcada dividida en Zona Infectada y  Zona Tampón, un radio de 10 km alrededor de la zona infectada, en la cual se llevan a cabo los muestreos y análisis pertinentes para ver si existe una propagación por dicha zona.

 

En la zona infectada se llevan a cabo tratamientos insecticidas contra los vectores de la Xylella, se arranca y destruye in situ, en un plazo de 15 días y en un radio de 100 metros todo el material vegetal de especies hospedantes, además de todo el material vegetal con síntomas sospechosos de infección.

 

Se prohíbe además, una vez adoptadas estas medidas, plantar especies hospedantes en la zona infectada y trasladar material vegetal que haya sido cultivado en la zona demarcada fuera de esta zona. Sí que podrá autorizarse el movimiento de vegetales dentro de la Zona Tampón, si llevan consigo el pasaporte fitosanitario y si existe una declaración responsable, firmada por el comprador, para cada transacción.

 

En lo que respecta al nivel nacional, el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), convocó a la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas (FEPEX) en una Mesa Sectorial Nacional de Sanidad Vegetal, en la que informó de la situación de la enfermedad Xylella Fastidiosa en España a raíz de la detección en Guadalest.

 

El Ministerio recordó que dispone de un Plan de Contingencia de la Xylella desde 2015, coordinado entre todas las Comunidades Autónomas, en base al cual se estableció un programa de vigilancia, además de planes de comunicación y formación al respecto.

 

Desde el Ministerio y desde FEPEX, el mensaje es que hay que seguir trabajando en el Plan de Contingencia, informar con transparencia y llevar el asunto con la mayor discreción y prudencia posibles.

 

FEPEX insistió en la importancia de que se establezcan y divulguen las indemnizaciones pertinentes con el objetivo de que los agricultores no tengan miedo de informar sobre las posibles infecciones.

 

Con la regulación comunitaria de indemnizaciones, las indemnización sería 50% comunitaria y 50% nacional, esta última repartida a partes iguales entre el Ministerio y Comunidades Autónomas, aunque aún no está del todo definido el nivel comunitario. Ni el Ministerio ni la Comisión Europea pagarán dentro de estas indemnizaciones el lucro cesante.

 

Sin embargo, organizaciones regionales como AVA-ASAJA, ya ha expresado públicamente que considera totalmente injusta e insuficiente la indemnización del Consell por el arranque de la Xylella, por lo que han presentado alegaciones a la propuesta para compensar a los agricultores afectados  de la Consellería de Agricultura de la Comunidad Valenciana.

 

A nivel europeo ya se están empezando a movilizar todas las maquinarias y la Oficina de FEPEX en Bruselas remitió el pasado lunes un escrito a la Asociación Europea de Viveros (ENA), en la que informaron de forma precisa sobre la situación, destacando que no se ha detectado ningún caso en viveros de plantas y hablando del refuerzo desde hace meses del Plan de Contingencia debido a la importancia económica que tienen los sectores citrícolas, frutal y olivar.

 

En la Asamblea General de ENA, celebrada el pasado 25 de julio en Finlandia, se expresó la preocupación por parte de sus miembros por la propagación de la Xylella Fastidiosa, por lo que se aprobó que la Asociación escribiría a la Comisión Europea para apoyar las medidas de erradicación establecidas para que se lleven a cabo de forma eficiente.

 

En definitiva, aún queda mucho que hacer y qué decir, pero podemos afirmar que la “maquinaria antiXylella” se está engrasando a pasos agigantados”.