UN RECLAMO PARA VENDER MÁS

"¿Desde que comenzó la crisis, en 2008, que habéis hecho nuevo en vuestro negocio para atraer clientes?", dijo Montse Morales, directora creativa de la escuela Ártidi, al inicio del Taller del Mercat dedicado a la paquetería y a la presentación del producto, que se celebró el junio pasado. Y se hizo un gran silencio en el aula, donde los más de veinte floristas asistentes reflexionaban.

Morales acudió al Mercat con ganas de despertar las conciencias y estimular la creatividad, tan necesaria para sacar adelante un negocio.Y con toda seguridad, podemos afirmar que lo consiguió. Los profesionales, que siguieron su discurso con atención, expresaron satisfacción por un curso planteado desde el punto de vista del marketing visual, más que desde la vertiente artística propia del arte floral a la que están acostumbrados.

Morales desplegó múltiples ejemplos para aplicar al escaparate de la tienda, conjugados con iniciativas curiosas, como la creación de un servicio de paquetería para cualquier objeto que nos lleve el cliente, con la intención de transmitir la necesidad de innovar y buscar la manera de diferenciarnos de la competencia. "Ninguna de las técnicas y trucos que os he contado hasta ahora sirve de nada si, una vez el cliente entra en la tienda, somos unas estúpidas", dijo, provocando sonrisas. Las imágenes presentadas sugerían una nueva manera de pensar y entender la floristería, enfocada a satisfacer las necesidades del cliente y a dar un valor añadido. "Hay que reflexionar sobre cuál es la experiencia que ofrecemos al cliente cuando entra en nuestra tienda", dijo, e insistió en otro aspecto fundamental para el buen funcionamiento del negocio: la base de datos de clientes, que son los receptores de las comunicaciones que tiene que hacer la tienda, para anunciar promociones, descuentos especiales y otras iniciativas que llevamos a cabo, como por ejemplo, una campaña para "adoptar una planta" dirigida a niños y niñas, para provocar la visita del niño con la madre cada semana, en la tienda, con la excusa de regarla ...

"¿Cómo serán las floristerías el 2093?", exclamó Morales, haciéndonos imaginar cómo habrá cambiado el mundo, la forma de vender, el modelo de negocio ... Por eso, también incentivó el networking entre los floristas presentes. "La intención es revolucionar la floristería a través de la paquetería, con acciones de marketing", confesó. ¡Seguro que lo consigue! ENVOLVER OBJETOS CON PAÑUELOS DE TELA En medio de tantas ideas, también hubo tiempo para la práctica. Con cintas de colores variados, Morales explicó trucos y técnicas de venta y como hacer lazos y otros adornos con papel y cinta.

También los asistentes compartieron sus trucos con el resto, lo que enriqueció bastante el contenido de la clase. Mención aparte merece el furoshiki, arte de origen japonés de envolver objetos con pañuelos. Desde un libro a una botella, ningún objeto escapa a la originalidad y la belleza del furoshiki. Álbum de fotos del Taller de Paquetería y Presentación del Producto