Pot Covers biodegradables: una forma sostenible para ganar visibilidad en los puntos de venta

En un lineal cualquier productor ha de competir con decenas o cientos de plantas de otras empresas. El cliente, al entrar a un centro de jardinería, ve un mar de plantas, flores o árboles. Su vista va de un estante a otro, de un macetero a otro… todo a una gran velocidad. Se produce un bombardeo de estímulos. ¿Cómo destacar entre tantos productos, que en muchas ocasiones el comprador no sabe ni distinguir?

Una de las soluciones que te planteamos y que ofrecen grandes posibilidades son los Pot Covers, o cubiertas para macetas. Su uso puede ser perfectamente compatible con la identificación de la planta mediante las etiquetas habituales en las que definimos variedad, características e información oficial como el pasaporte fitosanitario, de la planta en concreto.

Así, el Pot Cover es un complemento con el que se amplía la superficie con la que contamos para hablar de nuestro producto, captar la atención gráficamente y hacer branding. En este elemento podemos añadir reclamos publicitarios con diseños llamativos, mensajes, o fotografías atractivas que destaquen la planta. Asimismo, mejora la presentación de la maceta que en muchas ocasiones no está lo suficientemente limpia en el vivero en el momento de su comercialización y puede resultar más rentable en tiempo y económicamente cubrirla con un Pot Cover que tener que limpiarla o sustituirla.

Pot covers realizados con B-500, un gesto sostenible

En un mercado en el que el consumidor reclama cada vez más el uso de materiales sostenibles y en el que las administraciones van limitando el plástico, también existe una opción totalmente biodegradable para este recurso de comunicación. Se trata de los Pot Covers fabricados por Floramedia en B500, un material basado en celulosa, es decir, un revestimiento en base biológica (PLA, un poliácido láctico) en ambas caras, que es totalmente biodegradable y ecológico, a la vez que mantiene las propiedades de rigidez y resistencia a la humedad necesarias en todo elemento de packaging que acompaña a una planta. En su producción se utilizan igualmente tintas UV, con factor máximo de resistencia a la degradación por exposición al sol al igual que se trata en las etiquetas

El material B500 fusiona el compromiso con la conciencia ecológica con la innovación, y además a un coste muy atractivo. De este modo, las empresas pueden cumplir con los compromisos medioambientales adquiridos con sus clientes.