Los franceses usan su jardín principalmente para comer y hasta un 96% lo ha vallado

Los franceses afirman que su actividad preferida a realizar en el jardín es la de comer al aire libre y hasta un 47% de los jóvenes del país galo prefiere plantas como los cactus, las “carnívoras” y los bonsáis. Son algunas de las conclusiones que se desprende del estudio realizado por el Instituto Francés de Opinión Pública -empresa líder en estudios socilógicos en el país- para Clotures Grillages, empresa gala de venta online de cerramientos de jardín. Esta encuesta realizada entre más de 1.000 franceses mayores de 18 años aborda los hábitos de uso del jardín, de intereses por las plantas y, cómo no, las preferencias en la compra de cercados.

Según este estudio, la mayoría de los encuestados disfrutan de su jardín para actividades sociales, mientras que la jardinería queda como hobby personal. Así, la actividad preferida en el jardín, con un 63%, es la de comer al aire libre, seguida de hacer barbacoas (58%). Le siguen disfrutar del jardín para relajarse (38%), hacer fiestas (34%) y la jardinería en familia (21%). 

Hasta un 79% de los franceses preguntados asegura que las plantas tienen un poder “relajante” sobre ellos y un 68% se siente triste cuando se mueren. El 45% asegura que compra plantas de la misma forma que compra ropa. Un dato curioso: un 15% le pone nombre a sus plantas. El informe detalla que hasta un 47% de las personas menores de 35 años optan por plantas “originales” como los cactus, los bonsáis y las “carnivoras”, si bien hasta un 36% lo ven como una “tarea” extra en su día a día.

¿Por qué y cómo vallan sus jardines los franceses?
Respecto a los cerramientos de jardín, hasta un 96% de los encuestados optó por vallarlo. Un 92% de los participantes en el estudio de entre 18 y 65 años considera que es importante delimitar su propiedad por seguridad, si bien este porcentaje baja hasta el 84% entre las personas mayores de 65 años.

Los motivos principales para vallar la propiedad son la privacidad (88%), la seguridad (86%) y garantizar la cobertura del seguro (80%). Le siguen evitar la fuga de mascotas (72%), la salida de los niños del jardín (68%) y desconectar mentalmente del exterior (68%). El 63% lo hace para evitar la entrada de animales, el mismo porcentaje que compra una valla para reducir la contaminación acústica. La mayoría, un 61%, opta por la malla de alambre para cerrar su jardín, seguida de los setos, opción preferida por un 42%. A continuación, un 31% de los franceses cierra su jardín con un muro alto y un 19% con un murete. El 9% optó por el vallado de madera, un 4% por el de bambú y un 3% por las alambradas.