EFSA se encargará del cambio de protocolo de erradicación de la Xylella

La Comisión Europea ha dejado en manos de los científicos de la EFSA, Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, el cambio de protocolo de erradicación de la Xylella fastidiosa. Esta institución ya está trabajando actualmente en soluciones equilibradas y efectivas frente a la bacteria. Esta entidad tiene previsto actualizar los protocolos y la normativa de la decisión europea en abril.

Los responsables de la Comisión Europea explicaron que no han recibido ninguna petición por parte del Ministerio sobre llevar a cabo un plan de contención. Aunque en cualquier caso manifestaron que la normativa europea establece el plan de erradicación y únicamente se pasa a la contención cuando no es posible erradicar la plaga.

 

En este sentido si les llega una solicitud por parte del Ministerio la estudiarán, recogerán informes, realizar auditorías y emitir un informe final de los científicos sobre la situación.

 

Ante la situación en Alicante, la CE señaló que el principal problema que tiene es que los actos judiciales y los afectados están entorpeciendo y retrasando las tareas de erradicación, afirmaciones que desde colectivos como Asaja y AXFA (Plataforma de Afectados por la Xylella fastidiosa) han recibido con “indignación”. En esta línea señalaron que no existe inconveniente “para entrar en las parcelas y arrancar, que es una excusa para justificar la nula capacidad de gestión en relación con la crisis de la Xylella”, sentenció el presidente de Asaja Alicante, Eladio Aniorte.

 

Asimismo aseguró que hay tres parcelas valladas “en las que han necesitado autorización judicial para entrar”, pero que en el “99% de los casos entran y salen las máquinas trituradoras cuando quieren y cómo quieren”, apostilló el presidente de Asaja Alicante.

 

Al margen de la labor de los científicos, la Unión Europea reconoce que abonarán el 50% de las indemnizaciones, pero que el importe lo establecerá cada Región. Así mismo, los responsables de la Comisión Europea también se comprometieron a trabajar en tres líneas: tratar de amortizar y dotar de uniformidad el cálculo de las indemnizaciones para los todos los estados miembros; sugerir a la GVA que incremente el valor de las indemnizaciones pues es básico y principal que las ayudas sirvan para compensar el daño real que está provocando el arranque y destrucción de las parcelas y también se comprometieron a agilizar los pagos, pues transcurrido un año y medio aún no han indemnizado a ningún agricultor.