El mirto o arrayán (Myrtus communis) es un arbusto nativa del sudeste de Europa, creciendo en suelos arenosos y próximos al mar. Es un arbusto siempreverde y aromático de hasta unos 4 m de altura y follaje compacto. Las hojas son lanceoladas, opuestas, y bastante duras, de color verde oscuro por el haz y más claro por el envés, con glándulas oleíferas transparentes.

 

Sus flores blancas, solitarias de 1 a 2 cm de diámetro son muy fragantes compuestas de 5 pétalos y 5 sépalos, floreciendo en primavera. El fruto es una baya comestible redondeada de 1 a 1.5 cm de diámetro, de color azul oscuro metálico al madurar. Tiene muchas semillas, que son dispersadas por lo pájaros que se alimentan de ellos.

  

 

Este arbusto necesita lugares soleados o ligeramente soleados, aunque puede crecer a la sombra, aunque su floración será menos abundante. Necesita suelos sueltos y frescos, aunque soporta la sequía. Se puede podar y dar forma, por lo que es bastante utilizada como planta para seto o para el arte topiario.

  

 

Muy empleada como planta ornamental. Las hojas, flores y frutos son ricos en aceites aromáticos por lo que se emplean en perfumería. Desde la antigüedad a sido famosa, pues se consideraba símbolo del amor y la belleza.

 

 

Se reproduce mediante semillas a principios de la primavera, germinando rápidamente.