Gerbera jamesonii

Nombre común: Gerbera, margarita africana

Descripción:

La gerbera o margarita africana (Gerbera jamesonii) es una planta herbácea perteneciente a la familia de las asteráceas (asteraceae). Se trata de un pequeño arbusto cuyo follaje se dispone en forma de roseta que puede alcanzar los 50-75 cm de altura. Sus hojas también se disponen en forma de roseta, son elípticas, lanceoladas y alargadas, también pelosas.

Esta planta tiene un porte muy compacto a medida que va madurando, lo cúal le otorga un gran interés ornamental para formación de arriates y agrupaciones florales.

La margarita africana tiene las flores heteromorfas, lo cuál implica que una misma especie puede tener colores o formas distintas en sus flores. La inflorescencia de esta planta se dispone en capítulos al igual que otras asteráceas. Pueden ser de tonos rojizos y anaranjados principalmente, aunque los diferentes cultivares proporcionan gran variedad de tonalidades.

Cultivo:

Ampliamente distribuida por el mundo, cultivada como ornamental. La margarita africana crece en exposiciones iluminadas pero no expuestas a la incidencia directa de la luz solar. 

Debe crecer en entornos con temperaturas que superen los 7ºC. No es mur rústica, con lo que no soportará heladas y tendremos que protegerla del viento y de los cambios bruscos de temperatura. 

No puede desarrollarse en suelos calcáreos y/o arcillosos. Requiere de sustratos que permitan una correcta aireación y drenaje, con proporciones de arena gruesa y alta presencia de matéria orgánica.

Debemos abonarla de manera orgánica dos veces al año, en primavera y otoño. También podemos aplicar abonos minerales cada 2-3 semanas durante la primavera y verano, de este modo tendremos la gerbera con una floración longeva y abundante.

Requiere de riegos moderados pero regulares, disminuidos durante el invierno, y aumentados durante la época estival para compensar la mayor demanda de recursos hídricos. Es una planta que no soporta el encharcamiento, de ahí la raíz de la importancia de tener un buen drenaje en el sustrato que impida los encharcamientos y la asfixia radicular.

Requiere de podas mensuales para favorecer el rebrote y el desarrollo del resto del follaje. Eliminando 2 o 3 hojas de manera mensual será suficiente para esto. Se trata de una planta susceptible de verse atacad por el pulgón, la cochinilla y/o la mosca blanca.

Multiplicación:

Puede propagarse mediante división de mata, esquejado de sus tallos sin flores o mediante germinación de las semillas a partir de la primavera, cuando finalizan las heladas.

Usos:

Se trata de una planta muy apropiada para formar arriates, borduras o agrupaciones florales en parterres. También puede ser cultivada en maceta.